SI TU PERRO VINIESE CUANDO LE LLAMAS

¿CONFIARÍAS MÁS EN ÉL?

Confianza.

En eso se basan las relaciones, da igual si son entre personas o entre distintas especies.

Porque esto lo tienes claro: con tu perro tienes una relación, un vínculo.

Pero si cuando lo sueltas te ignora, o te hace caso solo a veces, o se acerca, pero mantiene las distancias y te torea ¿dónde queda tu confianza?

Yo te lo digo: sepultada entre la decepción y la ansiedad.

Más aún si nunca sueltas a tu perro porque se pone de 0 a 100 en tres segundos, y dejas de verlo en siete.

Es lógico, no poder soltar a tu perro porque ni gira las orejas cuando dices su nombre te mete en un pozo de angustia del que es difícil salir.

Y lo habrás escuchado mil veces: para poder soltar a tu perro y que no lo atropelle un autobús o se meta en peleas o provoque la Tercera Guerra Mundial, debe acudir cuando le llamas.

Y tú debes enseñarle a venir.

Así que, conociendo la naturaleza humana, habrás buscado y preguntado en un montón de sitios:

 

# En el parque canino.

# A tu vecino, que es adiestrador de la Policía Nacional

# A tu cuñado, que ha tenido perros desde niño

# En un grupo de Facebook o alguna cuenta de Instagram

# En Forocoches (donde hablan de todo menos de coches)

 

¿Qué tal te ha ido?

Déjame adivinar, la conclusión a la que has llegado es:

 

# Prémialo cuando viene

# Regáñalo cuando no viene

# Suéltalo con una correa infinita para pisarla y tirar de ella si no viene (buena suerte cuando se aleje más de 15 metros)

# Tu perro es especial, rebelde o dominante, y solo te servirá el collar eléctrico

 

Bien.

Si estás leyendo esto, o no te han gustado las conclusiones, o nada te ha funcionado.

Pues perfecto, porque entonces esta masterclass te ayudará.

En concreto, aprenderás:

 

🔷 Por qué la llamada perfecta no existe, te digan lo que te digan. Ahórrate la frustración del perfeccionismo, y pon el listón donde tenga sentido.

🔷 Las dos razones que llevan a que tu perro te haga caso cuando le llamas. La segunda es tan importante, que si aplicas solo eso, ni siquiera tienes que entrenar.

🔷 Los (muchos) motivos por los que ahora tu perro se hace el sordo o corre alejándose de ti, y cómo revertir eso y que acuda contento a tu lado.

🔷 Los 9 errores que destrozan la llamada y alejan a tu perro de ti.

 

Y ahora estarás pensando “necesito una garantía para apuntarme, ¿me prometes que, si aplico lo que cuentas, mi perro vendrá siempre que lo llame?”

Esta pregunta puedo responderla haciendo trampas.

Porque si me agarro al “si aplicas lo que te cuento”, entonces puedo garantizarte que sí, vendrá.

Pero no mucha gente es capaz de aplicarlo todo, tal cual lo explico.

Ahora me voy a centrar en lo que de verdad te preocupa, lo que de verdad te estás preguntando.

¿Puedo conseguir que mi perro venga siempre que le llamo?

La respuesta corta es “no”

Ni con esta masterclass, ni con ningún profesional (conmigo tampoco).

La respuesta larga es que vender la “llamada garantizada” es tomarte por idiota.

O mentirte para que escuches lo que deseas oír con toda tu alma.

¿Por qué digo esto?

Porque tu perro es un ser vivo, con muchas motivaciones, emociones, días buenos y malos, necesidades, querencias…

Y es muy ingenuo pensar que responderá SIEMPRE, dejando de inmediato lo que está haciendo, para acudir a tu llamada.

¿Respondes tú siempre, al instante, cuando otros te llaman?

Yo no.

Mira, te voy a contar un secreto que ningún profesional te va a contar.

El que te garantiza por el alma de su primogénito que tu perro vendrá siempre, te va a enseñar a usar un collar eléctrico.

Que oye, es una manera, no voy a entrar ahora en lo que yo pienso.

Pero, pero, pero.

Olvida mencionar dos detalles, dos cositas muy importantes que pueden condicionar tu decisión.

Una. No todos los perros acudirán a tu lado si los electrocutas para que lo hagan.

La mayoría sí, es cierto.

Pero no todos.

Algunos están demasiado motivados, y se aguantarán la descarga para seguir con lo suyo.

Otros son duros, los cabrones, y la soportarán.

Y otros tienen tanto miedo que correrán sin conocimiento en cualquier dirección.

Y tú solo estás en una, en las otras 267 alternativas no puedes estar.

Y dos. Usar un collar eléctrico implica coaccionar a tu perro para que crea que el mundo es muy peligroso si se aleja de ti.

Solo a tu lado se está seguro. A partir de cierta distancia, en cualquier momento puede pasarle algo horrible.

Y cuando funciona, lo está haciendo porque apela al miedo.

El resultado es que este sistema genera una factura.

Una que tendrás que pagar más adelante, en forma de miedos intensificados y conductas descontroladas.

Que, por supuesto, nadie te dirá que se asocian al uso del collar.

Incluso te dirán que las bloquees con el collar.

Bien, no sigo, ya ves por dónde voy.

Si eliges esa opción, adelante, pero recuerda todo lo que implica.

Si ya la idea te da nauseas, esta masterclass te interesa de verdad.

Nada de herramientas “educativas”, nada de provocar miedo, nada de facturas comportamentales a futuro.

Te sirve para entender la importancia de la llamada y sus limitaciones

Para aprender cómo enseñarla. Cómo estropearla. Y cómo repararla.

Y, sobre todo, cuando NO usarla.

Sabiendo esto, tu porcentaje de éxito se dispara.

Esto sí te lo garantizo.

LLAMADA CON SENTIDO COMÚN

 

60 €

LO QUE TE VIENE AHORA A LA CABEZA

¿SERVIRÁ PARA MI PERRO DE RAZA XXX?

No te quepa duda. Entender cómo funciona una llamada, qué cosas la destrozan, y en qué momentos no debes confiar en un comando entrenado para que tu perro acuda raudo a tu lado sirve para un chihuahua, un husky, un podenco, un border collie o un galgo.

Yo convivo con huskies y galgos, así que algo me han enseñado, y te lo voy a contar aquí.

¿CONSEGUIRÉ UNA LLAMADA TAN BUENA COMO LA TUYA?

Ni idea, cielo.

Me temo que aplicar lo que te voy a enseñar no es como construir un mueble de Ikea, que si se siguen las instrucciones salen todos iguales.

Pero que vas a darte cuenta de por qué ahora te va mal, y te vas a llevar un montón de ideas para mejorar, eso te lo garantizo.

Y que si haces esos cambios, vas a estar mucho mejor que ahora, de eso estoy segura.

¿SERVIRÁ SI SE VA TRAS UN CONEJO/CORZO/JABALÍ/GATO?

No.

Y te cuento por qué: cuando un perro caza, desconecta. Y si desconecta, no te oye. Ni a ti, ni una explosión nuclear. No hay entrenamiento ni método que pueda superar eso. Salvo, y no siempre, un collar eléctrico.

Pero si has leído lo anterior, deberías pensar mucho sobre el asunto. Yo he convivido 30 años con razas muy cazadoras, y jamás me he planteado su uso. No me parece justo elegir perros seleccionados para cazar, llevarlos a sitios donde hay caza, y luego castigarlos por hacerlo.

Y dicho esto, te digo otra cosa. En la masterclass hablaré de este asunto, y de qué opciones hay para mejorar la gestión de este tema. Porque son las mismas opciones que necesitas conocer para gestionar la propia llamada en sí. 

¿QUÉ PASARÁ CUANDO PAGUE?

Recibirás un enlace para acceder a la web donde está alojada la masterclass.

Puedes verla las veces que desess, durante el tiempo que quieras. Eso sí, guarda el enlace para futuros accesos, porque no se puede entrar de ningún otro modo (aunque siempre me lo puedes pedir por email si lo perdiste, claro)

ME PARECE CARO

Claro, porque lo es. Si es barato no prestas atención ni te lo tomas en serio. Y si es gratis, es que ni la ves, ni te centras, ni te esfuerzas. Así que lo pagas bien, y lo aprovechas bien. Para quienes prefieren no pagar y no esforzarse está Facebook y ChatGPT

LLAMADA CON SENTIDO COMÚN

 

60 €

error: Este contenido está protegido